El chulo Abellán (Crónica de la feria de Málaga 16-08-2008)

Málaga 16 Agosto 2008
Se lidiaron toros de Pedro y Verónica Gutiérrez, desiguales de presentación. El primero fue devuelto por inválido y salió un sobrero de Julio de la Puerta que a la postre fue el mejor del encierro pero no se encontró con un buen torero.

MIGUEL ABELLÁN: Ovación y oreja protestada.
EL CAPEA: Silencio y silencio
ÁNGEL TERUEL: Silencio y Ovación

Sinceramente no se ni como empezar. Y cuando se llega a este punto, en el que uno no tiene argumentos ni para escribir es que algo no debe de ir bien. Lo que ayer se pudo ver en La Malagueta fue el resultado de una panda de niños malcriados, sin ambición y en algún caso, hasta sin educación. Me duele en el alma tener que escribir esto pero ayer fue una de esas tardes en la que uno se siente defraudado y ofendido.
Uno va a los toros con todas las buenas intenciones, con ganas de ver cosas interesantes y aún con el cartel de ayer, que a mi particularmente no me decía nada, acude uno con la esperanza de que tal vez ocurra algo.
Y si ocurrió, pero nada relevante con el toro sino con la personalidad de los toreros. Yo podré saber más o menos de toros, podré ser más exigente o menos, me podrá gustar o no un torero, pero lo que nunca me verán hacer es faltar el respeto a alguien que mejor o peor se está jugando la vida delante del toro. Obviamente el torero es un producto que se expone ante un público que luego le juzgará en función a lo realizado en el ruedo, pues para ello paga una entrada, cara por cierto, y por tanto tiene el derecho a opinar de lo que ocurre en el ruedo. Este asunto se lo deberían de enseñar a los chavales en las escuelas taurinas para que desde sus inicios se vayan familiarizando con las críticas que para bien o para mal, el público hará en función de su actuación. Sin embargo, lo que no se puede concebir bajo ningún concepto es que un torero venga a reírse de una afición que ha pagado una entrada para verle torear y mucho menos que le falte el respeto de la manera en la que ayer lo hizo el impresentable Miguel Abellán. Este sinverguenza “chuleras” debió ayer tarde quedarse en su casita y no venir a Málaga a dar por culo, porque como decía aquél, “pa chulo chulo, mi pirulo”.

MIGUEL ABELLÁN
Ni mucho menos se merece este “enterao” que le dedique algunos de mis valiosos minutos. Pero para que se enteren les diré que el madrileño castizo nos tomó el pelo en el cuarto toro de la tarde. Basó su faena en mantazos muy feos, toreando por las nubes y fuera de cacho totalmente. Parte del público pedía música para la faena y como el maestro Puyana no rompía a sonar fue el propio torero quién se encaró con la banda para que tocara. La Banda, que este año no da una y posiblemente acojonada, comenzó a tocar, pero como lo que estaba sucediendo en el ruedo no trascendía a los tendidos pues paró. Y de nuevo el caradura de Abellán se volvió a encarar con la Banda. Al público, tras la soporífera tarde de toros que estábamos viviendo, aquello le resultó interesante y Abellán decidió aprovechar el tirón comenzando a pegar muletazos con mayor acierto. Dejando ver que antes no había toreado bien porque no había querido, porque el toro se dejaba. Eso ya fue suficiente para que el inculto público de La Malagueta jaleara con fuerza lo que estaba realizando “El Chulo”. La estocada fue muy fea de colocación y precisó de un descabello, pero el público, que no da para más, pidió la oreja que el Sr. Moya, otro incompetente y posiblemente también acojonado por la familia Abellán, concedió. Una oreja regalada totalmente y que provocó división de opiniones con fuertes enfados en la vuelta al ruedo.
Otro gesto feo y chulesco lo tuvo Abellán cuando iba a recoger la orejilla de manos del alguacilillo y le ordenó Abellán que el alguacil se desplazara hasta donde estaba él, a lo que se negó en rotundo el alguacil obligando al torero, tal y como mandan los cánones a recoger el trofeo justo donde se encontraba el mozo.
Me sorprende que los portales taurinos no pongan en sus reseñas que la oreja fue protestada. A lo mejor es que los que escriben las crónicas no estuvieron presentes, estaban ciegos o estaban acojonados no fuera a ser que el padre del torero le pegara una paliza como ya ocurrió en Madrid con otro periodista taurino. El caso es que para mi señores, desde este mismo momento, el impresentable, chulesco, sinverguenza y fracasado Miguel Abellán se convierte en persona no grata en este blog. A mí siempre me han inculcado que los toreros, ante todo, son hombres que se visten por los pies. Y un torero, debe ser precisamente eso, torero, dentro y fuera de la plaza. Y que conste que Miguelito Abellán no es el único torero chulo. A lo largo de la historia ha habido muchos toreros chulos, pero siempre con clase. Porque hasta para ser chulo hay que tener clase, recuerden sino a Luis Miguel Dominguín, que se autoproclamó número uno en Las Ventas de Madrid, pero Dominguín era chulo, pero ante todo y por todo Torero, y sin embargo este Abellán es un chulo barriobajero y repugnante al que por si fuera poco la palabra Torero le viene grande.

EL CAPEA
Este chaval va en retroceso. Ayer celebraba sus cuatros años como matador de toros en Málaga y la verdad que es grave lo de este torero. Con la gran cantidad de oportunidades que se le ofrecen, estando presente en las grandes ferias y aún no sabe ni manejar los trastos. Toreo vulgar, despegado, sin decir nada. No se como el padre no lo retira de esto y lo pone a trabajar en su finca.

ÁNGEL TERUEL
Se presentaba en Málaga el joven Teruel y en su primer toro perdió los papeles. No sabía muy bien cual era su función dentro de la plaza y se dedicó a pegar pases sin ton ni son. Sin embargo se enmendó algo más en el que cerró plaza, instrumentando muletazos que en la mayoría de las ocasiones estuvieron fuera de cacho.

En definitiva, la tarde de ayer fue de esas que hay que borrar inmediatamente de la memoria si no queremos caer gravemente enfermos. Y a estos tres “cantamañanas” si por mi fuera, los pondría a hacer carreteras para que por una vez en su vida dieran palo al agua. Si este es el futuro de la fiesta, si el toreo depende de toreros como estos, yo me retiro de esto.
La única que salió ganando ayer fue la empresa Fernando Puche UTE que con un cartel de muy bajo costo y gracias a los abonados y unas cuantas entradas de algunos despistados que se dejaron caer ayer por La Malagueta, ganó dinero a espuertas.